Los cargadores y los puntos de recarga están por todas partes. A lo largo de la autopista, en aparcamientos, alrededor de edificios de oficinas y en zonas residenciales. A menudo nos preguntan: "¿Cuánto tarda en cargarse un VE en sus estaciones de carga?". Aunque la pregunta puede ser sencilla, la respuesta es un poco más complicada. La velocidad de la sesión de carga depende de una serie de variables.

¿Qué variables afectan a tu velocidad de carga?

Además de la potencia del conector de carga rápida que elijas, hay varios parámetros que afectan a la velocidad de carga:

• Batería: Capacidad y estado de carga de la batería
• Tecnología de carga de su coche: Velocidad de carga máxima admitida, curva de carga y, en relación con ello, gestión del paquete de baterías (sistema de gestión de baterías/ BMS).
• La temperatura: Tanto la temperatura exterior como la de la batería.

Este blog proporcionará más información sobre cada una de estas variables.

Batería

Capacidad de la batería

La capacidad de la batería de un VE influye en el tiempo de carga. Parece bastante obvio que cuanto mayor sea la capacidad de la batería, mayor será la autonomía del VE. ¿O no? En realidad, el peso y la eficiencia de conducción del vehículo también desempeñan un papel importante. Por ejemplo, la autonomía realista del Audi eTron con una batería de 86 kWh es de aproximadamente 320 km, mientras que el Hyundai IONIQ 5 de larga autonomía con una batería de 76 kWh tiene una autonomía realista de 385 km.

La capacidad de la batería se mide en kilovatios hora (kWh), lo que significa que cuanto mayor sea la capacidad en kWh de la batería, más tiempo tardará en cargarse. La batería de 86 kWh del Audi tarda más en cargarse que la de 76 kWh del Hyundai al mismo nivel de potencia.

Y de nuevo, hay un truco. Lo anterior sólo se aplica si ambos vehículos cargan al mismo nivel de potencia. En muchos casos, los fabricantes de automóviles optan por aumentar la potencia máxima de carga del vehículo cuando introducen modelos con una batería de mayor capacidad.

Estado de carga

El estado de carga (SoC) es el nivel de carga de una batería en relación con su capacidad. En pocas palabras, cómo de llena está tu batería. El estado de carga influye mucho en la velocidad de tu sesión de carga rápida. Encontrará más detalles sobre este tema en el apartado 'Tecnología de carga de VE' de este blog.
No queremos ser aguafiestas al afirmar que no es posible realizar una carga rápida de 0 a 100% con la potencia de carga anunciada. Hagamos una comparación con el llenado de una botella de agua: Si abres el grifo del todo, la primera parte de la botella se llenará rápidamente, pero la última parte funciona mejor cuando el grifo se abre sólo parcialmente, lo que facilita llenar la última parte vacía de la botella sin derramar.

Esto es lo que se denomina curva de carga de la sesión de carga. Difiere según VE, pero en general, el estado de carga más óptimo para la carga rápida se sitúa entre el 10 y el 80%.

Tecnología de carga del VE

La potencia máxima de carga de los modelos de VE varía. Por ejemplo, el Audi eTron mencionado anteriormente puede cargar rápidamente a 155 kW, y una versión específica del Porsche Taycan puede incluso llegar a 270 kW. De media, multiplique la potencia de carga por 5 para obtener una estimación de kilómetros añadidos en una hora, y 6 o incluso 7 veces si conduce de forma económica. Sin embargo, ten en cuenta nuestra comparación anterior sobre el consumo real de kWh por kilómetro: Varía según VE.

Si ambos vehículos eléctricos tuvieran el mismo tamaño de batería, el Taycan la cargaría completamente antes. Sin embargo, la curva de carga y el estado de carga desempeñan un papel importante a la hora de determinar si este es realmente el caso.

Máxima potencia y sistema de gestión de la batería

La velocidad de carga de un VE depende en gran medida de la tecnología de carga del coche. Por ejemplo, algunos VE son capaces de cargar a un pico de potencia máxima elevado, aunque después de este pico, la potencia de carga bajará para proteger la batería. Aquí es donde cobra importancia la curva de carga.

La curva de carga está relacionada con la potencia que se puede esperar frente al estado de carga de la batería en ese momento. El sistema de gestión de la batería (BMS) desempeña un papel importante en la gestión de la curva de carga.

Ejemplo de curva de carga VE con alta potencia pico.

Cuanto mejor sea la curva de carga general, es decir, cuanto mayor sea la velocidad media de carga, más rápido podrá cargar completamente su VE. Una buena curva de carga es aquella en la que puedes cargar tu VE a alta potencia durante mucho tiempo, incluso cuando la batería está entrando en un estado de carga elevado. A continuación se muestran dos ejemplos a modo de comparación.

VE 1 Mayor pico de potencia de carga que VE 2, pero la potencia de carga cae por debajo del EV1 en el SoC entre 50-60%.
VE 2 Curva plana por encima de 140 kW a partir del 30-80% de SoC.

Al final, todo depende de cuántos kWh / kilómetros quieras añadir. Si estás de camino a casa y tienes un cargador doméstico, cargar hasta el 60% podría ser suficiente y VE 2 conseguiría una velocidad media de carga más alta para esta sesión de carga.

La temperatura de la batería

Al conducir largas distancias, la batería de tu VE se calentará. Dependiendo de la marca del vehículo, dispondrá de refrigeración pasiva o activa de la batería. En el caso de la refrigeración pasiva, la potencia de carga se reducirá tras largos periodos de conducción a alta velocidad. Los VE más nuevos suelen estar equipados con refrigeración activa mediante bombas de calor, lo que garantiza que la batería esté a la temperatura ideal para la carga.

Otro factor importante que determina la velocidad de carga es el clima. Las baterías VE rinden mejor entre 20 y 30 grados centígrados. Al iniciar un viaje, la batería sigue estando fría, incluso en verano. Cuando hace frío, la batería debe calentarse primero para cargarse correctamente. Algunos modelos y marcas, como Tesla, tienen activado el precalentamiento al seleccionar un cargador rápido. Esto garantizará que la batería esté a la temperatura adecuada antes de la carga, proporcionando una mejor experiencia de carga. Sin embargo, tenga en cuenta que el precalentamiento también cuesta energía; ahorra tiempo, pero no es la solución más sostenible.

Los dos ejemplos siguientes ilustran la diferencia. Mismo coche, mismo cargador rápido, pero una sesión de carga en mayo y otra en diciembre.

VE carga en primavera: tras iniciar la sesión a 120 kW, la velocidad sigue aumentando y se estabiliza
VE carga en invierno: tras iniciar la sesión a 120 kW, la velocidad disminuye

El tipo de cargador: CC o CA

Aunque nos centremos en VE y sus capacidades de carga, la estación de carga también influye en la potencia de carga que puedes esperar. Tu VE puede ser capaz de cargar a 150 kW, pero si lo conectas a una estación de carga que llega hasta los 50 kW, esto último es lo que obtendrás.

La velocidad de carga varía en función del tipo de cargador que elijas. Existen tres tipos diferentes de cargadores: cargadores normales (CA), cargadores rápidos (CC) y cargadores ultrarrápidos (HPC). Un cargador de CA carga un VE a un nivel de potencia inferior, lo que garantiza que el VE no tenga que "trabajar tanto" como con un cargador de CC. Cuando se carga en un cargador de CC, tanto el coche como el cargador tienen que ajustarse continuamente. Básicamente, el coche le dice incesantemente al cargador lo que necesita en términos de voltaje y amperios, lo que a menudo resulta en una carga a altos niveles de potencia al principio, pero el pico disminuye rápidamente. Se aplica para proteger la batería. Por tanto, un cargador de CA carga de forma mucho más constante, pero también a una velocidad mucho menor.

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